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Solución al caos vial en el DF

 

La ciudad de México, como otras tantas grandes urbes del país, padece un serio problema de movilidad vial, afectando no solamente la vida de quienes manejan los vehículos sino también la de los ciudadanos de a pie, quienes reciben todas las descargas de polución que emiten los autos, hecho que las autoridades de salud, han comprobado, reduce en cuando menos 10 años el tiempo de vida de quienes están expuestos a esta contaminación.


El problema se agrava, de tal forma, por la poca o nula planeación de las ciudades y la tendencia de crecimiento constante de los  vehículos en circulación, que tan sólo en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México suman 3.3 millones de autos que circulan diariamente por sus arterias viales, de acuerdo con el Fideicomiso para el Mejoramiento de las Vías de Comunicación del Distrito Federal, organismo del Gobierno del DF.


Esta situación de aglomeración vehicular ha ocasionado, con el paso de los años, la disminución de la velocidad promedio con que circula un vehículo en el Distrito Federal y la pérdida de millones de horas-hombre diariamente. La Comisión de Derechos Humanos del DF hizo un estudio donde se afirma que perdemos 3.3 millones de horas hombres diarias.


Ahora bien, en el estudio “Programas Nacionales de Vivienda y Desarrollo Urbano 2013-2018”, que elaboró la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, la velocidad promedio con la que se desplaza un vehículo en el Distrito Federal se redujo de 38.5 kilómetros por hora en 1990 a 13 kilómetros por hora en 2010, lo que aumentó la duración de un recorrido en promedio 28 minutos.


La pregunta que se hacen a diario los capitalinos es si este caos tiene solución. La respuesta nos las da Salvador Ortega, ombudsman empresarial, miembro de la Coparmex, quien ha dedicado gran parte de su tiempo investigar este problema y encontrarle una salida.


En entrevista con Libertad Política, el Salvador Ortega señala que la circulación vehicular en la Ciudad de México mejoraría notablemente a través de la implementación de un Sistema de Circulación Continúa de su autoría, denominado Sistema de Intercomunicación Vial Inteligente (SIVI) para el Distrito Federal, que está basado en tres ejes, cuyo objetivo principal es lograr hacer vías rápidas de norte a sur y de oriente a poniente en la ciudad, con lo  misma infraestructura vial con que cuenta, con el fin de evitar que los autos se detengan y darle fluidez a la circulación vehicular.


“Mi proyecto es una denuncia en la que estoy anunciando a las autoridades que puede haber una ‘arterosclerosis’ en la ciudad, es decir, que se pare la ciudad por falta de vías”, advirtió el Ombudsman.


“El  objetivo principal del SIVI es que el vehículo no pare de norte a sur y de oriente a poniente. Tenemos que tener vías rápidas porque la ciudad las necesita, utilizando la misma infraestructura que ya tiene el país y la ciudad sin hacer grandes gastos en modificaciones”, sostuvo.


Con este Sistema, dijo, se reducirá la perdida de millones de horas hombre, la emisión CO2 a la atmósfera, se influirá en el bolsillo de los que vivimos en la ciudad de México, los que consumimos la gasolina, ya que se vas a reducir la importación de gasolina.


Además de que este proyecto nos da la oportunidad de bajar puntos carbono, ya que de acuerdo con en el tratado de KIOTO si una ciudad reduce la contaminación tienes derecho a los puntos carbonos que los  maneja el Banco Mundial.


La salida

 

Salvador Ortega precisa los tres puntos con que cuenta el Sistema de Intercomunicación Vial en el Distrito Federal para acelerar la circulación, y son: la reingeniería de la Ciudad de México, la creación de estacionamientos y colocar nomenclaturas viales para guiar al conductor al destino que desea ir.

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El primer punto, de la reingeniería vial, explica, es crear nodos o puentes en los puntos neurálgicos de la ciudad, donde existe hoy en día embotellamientos viales.  Salvador ha identificado 300 puntos en el Distrito Federal susceptibles de mejora vial.


La idea es edificar puentes viales en cada uno de estos 300 puntos, con sus respectivas gazas o tréboles viales para dar salida a los automóviles a otras avenidas y evitar los semáforos y que los autos no se detengan en grandes vías de norte a sur y de oriente a poniente, ya que en las calles muy transitadas, el semáforo lo único que ocasiona es que se detengan los automóvil, afectando la circulación trasera hasta donde se ubica otro semáforo, ocasionando un nudo vial. Son alrededor de 300 nodos neurálgicos que se necesitan urgentemente cada uno tendría una inversión de 150 mdp.

 

Por esa razón, explicó, se requiere hacer un puente de 4 o 5 metros de altos, muy sencillos, como los que se hicieron en el Viaducto o el Periférico,  que en determinados puntos se hizo un trébol. Con este sistema se eliminarían de la ciudad mil 100 semáforos, mil 200 intersecciones y más de mil 500 topes, y eso “nos lleva a evitar, en promedio, 64 millones de paradas diarias innecesarias de vehículos, toneladas de contaminación, evitar accidentes y muertes”.


También se tiene que planear una estrategia para interconectar a los microbuseros con el metro y hacer que el transporte público, como el metrobús,  pase a determinada hora, como ocurre en otras ciudades del mundo, y los trabajadores o usuarios sepan exactamente a qué hora sale para que planeen sus tiempos de viaje, y en las horas pico enviar metrobuses no con un vagón sino con tres, cuando menos, pero eso requiere calcular los tiempos y movimientos de trabajo.


En cuanto al segundo  punto, el Ombudsman Empresarial, dijo que es necesario la creación de estacionamientos en las oficinas públicas, ya que el gobierno pone el mal ejemplo porque en oficinas como el ISSSTE, Setravia, Tesoreria, donde acuden cientos de personas por un servicio o realizar pagos, no existen los estacionamientos y por consiguiente se estacionan en doble fila, ocasionando el freno a la circulación. “Hay que recordar que el arroyo vehicular debe despachar 50 vehiculos por minuto”


Finalmente, con respecto a la nomenclatura debe ser inteligente, ésta se debe colocar bajo los puentes y en cada carril para ir guiando al automovilista a determinado punto de la ciudad y así vaya escogiendo el carril que le corresponde y no se detenga.


Otro punto es educar al peatón y al automovilista a través de los tiempos que tiene el gobierno en los medios de comunicación, particularmente en la televisión, para invitar a un vecino que vaya por el mismo lugar y así evitar usar menos autos por persona, o que los vehículos te den el paso cuando poner la direccional, porque hoy en día parece que les dices no me dejes pasar, y que los peatones crucen por las esquinas, utilicen los puentes peatonales.


Este proyecto ya lo he presentado a diferentes autoridades, pero no me han dado una respuesta positiva. Actualmente está en estudio con la presidenta de la CDHDF, Perla Gómez, para que lo podamos proyectar a toda la sociedad.